Carlos Marx |
La fortaleza del sistema económico industrial y su suficiencia transformadora del sistema social, produjo en los analistas una percepción de desarrollo histórico en las generalización de las nuevas manifestaciones de producción, conformándose en unas condiciones de vida trabajo y exteriorizaciones sociales uniformes. Situando la clase de trabajadores manuales de la industria como sector más numeroso de la población. Por lo que, los partidos socialistas obreros defendieron el sufragio universal, para obtener con ello la capacidad de llevar a cabo las reformas sociales necesarias. Carlos Marx subrayaba, que el sufragio universal equivalía al poder político para la clase obrera, dado que constituía el núcleo mayoritario de población.
Pero las circunstancias de los hechos reveló que no se podía establecer una imbricación entre <<industrialización-obreros-mayoría-sufragio universal-socialismo>>, pues el desarrollo de la sociedad industrial capitalista no fue semejante en todos los lugares, sin un desarrollo homogéneo, resultando a estructuras de clases mucho más complejas y diversificadas, de lo que se podía haber pensado en un principio.
Emergieron y se establecieron todo un grupo de sectores intermedios que tenían posiciones sociales, identidad de status y sistemas de valores socio-políticos que no correspondían en todos matices con los que los trabajadores manuales de la industria y la construcción. Por otro lado las posiciones políticas y de clase no se manifiestan de un modo tan automático y predeterminado como se podría pensar. Muchos trabajadores eran influidos además por ideas religiosas y por orígenes culturales y nacionales, por lo que sus posiciones políticas se manifestaron más imprecisas hasta conservadoras, conformándose en un fenómeno de <<aburguesamiento obrero>> y a <<crisis de la conciencia de clase>>.
Después de la Segunda Guerra Mundial, y en la dinámica de la marcha de la recuperación económica, la atención recayó en el papel social y político de las clases medias, caracterizada por el significativo aumento de estos sectores sociales en los países más desarrollados y por la manifestación de pensamientos más precisos sobre las clases sociales.
Una influencia por elementos en el ámbito tecnológico, económico y social, experimentado en las sociedades más industrializadas en las décadas de los años cincuentas, sesenta y setenta. Estableciendo un nuevo modelo de sociedades en las que la relación de trabajadores manuales descendían, mientras que las viejas clases medias –propietarios- se mantenían, y unas nuevas clases medias en crecimiento.
Unos de los fundamentos significativos a tener en cuenta de las clases medias es la sólida influencia que tienen los elementos subjetivos y de identificación de status que contribuyen en su delimitación, como la fluidez de fronteras en sus posiciones políticas.
Resumen de epígrafe de La sociedad dividida de José Félix Tezanos
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