¿Quiénes impulsan el progreso?
Los cambios efectuados en la base de los sistemas productivos están transformando considerablemente la lógica de la desigualdad y de la estructura de clases, por consiguiente, modificando el carácter y la configuración de los sectores sociales. Una complejización en la estructuras de desigualdad que da lugar a un mayor grado de contradicciones. La típica imagen de una clase contra otra ha de ser reemplazada por plasmaciones más complejas, entendiendo igualmente, que los comportamientos de los sujetos sociales en conflicto van a propender a actuar sobre campos más heterogéneos, estableciendo a alineamientos cruzados complejos y variados.
En está lógica, la tarea que tendrán los partidos políticos y los movimientos sociales que quieran <<contar>> en la nueva configuración histórica, obedecerá a su capacidad para agregar intereses para no enfrentar a los nuevos sectores discriminados con aquellos otros que aún no han vencido mujas de los tradicionales modos de dependencia y alienación. Estableciéndose que existe una inclinación hacia el incremento de las antítesis potenciales en presencia.
Carlos Marx |
Los análisis de clases específicos de Marx y sus orientaciones económicas muestran que esta teoría es un modo expresivo que venía acuciado por las exigencias de <<dramatización>> de los procesos políticos fuera de refutación empírica ni en la propia lógica económica. Una fragilidad teórica que acabó revelando una exposición enfocada a obtener una <<sobrefuerza>> añadida, establecida por una concepción regresiva de la <<dictadura del proletariado>>, o en inclinaciones hacia la militarización y burocratización de los <<partidos de vanguardia>>, etc.
La confirmación empírica de que la clase trabajadora manual, lejos de aumentar, se inclinaba a retrotraer su consistencia relativa en la configuración de la población activa, estableció nuevas orientaciones de los partidos socialdemócratas hacia nociones más globalizantes como <<partido de todo el pueblo>>, <<partido interclasista>>, <<partido recógelo-todo>>, etc. Logrando desfigurar la fragilidad de la teoría tradicional del sujeto en nuevas teorías del sujeto débil o difuminado.
El elemento más importante discrepante en el seno de la izquierda tuvo su raíz, en el requisito de encontrar soluciones eficaces de perentoriedad a las divergencias que proponía una orientación sociológica simplista de las clases sociales.
Adam Schaff |
La preponderante revolución tecnológica está estableciendo nuevos e importantes elementos de complejidad sobre la actuación de las clases. Por ejemplo, Adam Schaff ha resaltado la creciente disolución de la ambicionada clase social universal, en la que las tesis socialistas han pretendido la emancipación. Con la robotización del trabajo, se disuelve el sujeto básico, y supone dos cambios considerables:
· La robotización establece una inclinación hacia la merma del tiempo de trabajo y efectivos de la clase obrera manual.
· La robotización conlleva la supresión de la alienación-explotación-dominación, hacia un debilitamiento de la operatividad.
La complejidad generadas por la revolución tecnológica va a dar lugar a debates de suma trascendencia, resultando con ello, que de estas sociedades emergentes habrá que efectuar una adecuación mental y política para entender que:
· No hay un único elemento generador de los procesos de progreso histórico, ni una única causa de malestar, dependencia, alienación, explotación, miseria, etc.,
· La rapidez de las transformaciones confiere un significativo desfase en las concepciones en las que se soportaba el modo de organización colectiva.
· La complejidad social ascendente y la propia lógica diversa de los orígenes del desacople social, de asimetría, de conflicto, etc., pueden actuar como elementos de estímulo del progreso.
Resumen de epígrafe de La sociedad dividida de José Félix Tezanos
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